Entradas

Mostrando entradas de febrero 28, 2010

Tres Cuentos de Julio Garmendia 1898 - 1977

Imagen
LA TIENDA DE MUÑECOS No tengo suficiente filosofía para remontarme a las especulaciones elevadas del pensamiento. Esto explica mis asuntos banales, y por qué trato ahora de encerrar en breves líneas la historia —si así puede llamarse— de la vieja Tienda de Muñecos de mi abuelo que después pasó a manos de mi padrino, y de las de éste a las mías. A mis ojos posee esta tienda el encanto de los recuerdos de familia; y así como otros conservan los retratos de sus antepasados, a mí me basta, para acordarme de los míos, pasear la mirada por los estantes donde están alineados los viejos muñecos, con los cuales nunca jugué. Desde pequeño se me acostumbró a mirarlos con seriedad. Mi abuelo, y después mi padrino, solían decir, refiriéndose a ellos: — ¡Les debemos la vida! No era posible que yo, que les amé entrañablemente a ambos, considerara con ligereza a aquellos a quienes adeudaban el precioso don de la existencia. Muerto mi abuelo, mi padrino tampoco me permitió jugar con los muñecos

Memorias de un Amante Sarnoso. Por Groucho Marx

Imagen
1. ¡ b endita diferencia! h asta cumplir los cuatro años no establecí diferencia alguna entre los sexos. i ba a escribir ‘entre los dos sexos’, pero ahora se dan tantos matices, que si alguien dice ‘los dos sexos’ se expone a que los amigos le consideren un caduco anacrónico y se pregunten en qué caverna habrá vivido uno en las últimas décadas. m i primera visión de un ignoto mundo de ensueños tuvo lugar con ocasión de la visita que hizo a mi madre mi única tía, mujer adinerada y de sugestivos encantos. e staba casada con un famoso actor de vodevil, y, aunque todavía era joven, había viajado mucho, perdiéndose en más de una ocasión. t enía el cabello rojo y los tacones altos, y unas formas ondulantes que se acentuaban donde deben acentuarse las formas. ( l amento que mi extremada juventud me impidiera concertar con ella una cita). s u presencia llenó la casa de una exótica fragancia evocadora de insólitas tentaciones, que más adelante identificaría con el arom